En la segunda entrega de su texto «Lo dominicano en Tantas razones para odiar a Emilia (II)», publicado en el diario Acento, el escritor, crítico literario y profesor Manuel Matos Moquete devela cómo son perceptibles en la novela elementos autobiográficos que nos remiten a las vivencias de José M. Fernández Pequeño como escritor y migrante en tierra dominicana.
Fragmentos de una entrevista realizada al novelista en 2012 complementan de manera muy elocuente la siguiente definición de Matos Moquete:
«El autor de Tantas razones para odiar a Emilia fue un exiliado cubano en República Dominicana, que se aplatanó a nuestro medio y adoptó nuestro país como suyo batiendo el cobre de la subsistencia, como cualquier dominicano de a pie».
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